En el último hangouts hicimos un pequeño repaso sobre nuestros inicios en la informática y todos nos quedamos con gusto a poco. Personalmente, me concentré en la década de 1980 porque creía que tendría tiempo para una segunda vuelta de historias con mis vivencias de la década de 1990. El tiempo se me fue volando. Quizás sea buen momento para profundizar un poco con la historia…
Muchos de los editores consideran que tendríamos que tener una sección dedica a lo retro. La verdad que ya existe y podrá encontrar varios artículos con la etiqueta historia, retro o, mi favorito, retrospectiva.
Una de las cosas que recordaba es la Commodore 64, a la que ya le dedique un artículo con el panegírico a Jack Tramiel.
También conversé sobre mi primer PC 286. Las andanzas con la misma merecerían su propio artículo pero no tengo tiempo ahora. Igualmente, aproveche a comentar que prácticamente al mes de tenerla compré mi primer revista de computación -PC Magazine Argentina Nº 6- y en el mismo acto descubrí que todo lo que sabía sobre DOS, WordStart, Lotus 1-2-3, etc. era simplemente obsoleto ante un paradigma de ventanas, mouses y “lo que ves es lo que obtienes” de algo llamado Windows 3.1, Word, AmiPro y algunos otros.
Pero olvide algo importante. Más o menos al mismo tiempo, semanas más semanas menos, fue a la fiesta de la Manzana en la ciudad de General Roca, provincia de Rio Negro, Argentina. Allí había un stand con forma de computadora y termine conociendo algo llamado “Macintosh”. No pude resistirme y termine con mi Macintosh Classic “algunos” años después.
Un año después de eso tanto en Muy Interesante como en PC Magazine comenzaron a introducir el Newton. Con él conocí la tinta y me enamoré. Al igual que el Macintosh, no podía comprarlo en ese momento pero con el nuevo siglo, como buen retro-man, termine comprando y utilizando tanto para mi educación como para mis inicios laborales un Apple MessagePad 120 y, más tarde, un MessagePad 2000. Para mí, continúan siendo una leyenda que se extraña y comencé una serie de artículos que quedaron truncos por falta de tiempo. Ojalá podamos retomar este proyecto en el futuro.
Tal fue mi creencia en estos dispositivos, que por ese tiempo predecía que los teléfonos celulares eran una moda pasajera. Igual fortuna le deseaba al seudo-Newton de la Palm Pilot. Pero también es retro descubrir que uno nunca, pero nunca, acierta en sus pronósticos. Con el nuevo siglo finalmente yo también caí en la Era del celular, primero con un celular (Motorola C333) y, más tarde, con los smartphone (que en sucesión rápida fueron: Nokia 6670, Nokia N95, iPhone 3Gs, Samsung Galaxy ACE, Lumia 900, BlackBerry Curve e iPhone 6).
Pero antes de eso, incluso antes de mi primer PC con Windows 95, ya disfrutaba de un “smarthwatch”. Específicamente, el Casio DataBank con botones “digitales” (como le gustaba decir a mis amigos de adolescencia, yo sabía que eso era un error, pero desconocía el término correcto para estos botones que no eran botones). Tuve dos. El primero, dorado, entre 1991 y 1994. El segundo, a partir de 1995, prácticamente idéntico al de la siguiente fotografía…
Casio Databank DBC-60 |
Era mucho más que un reloj calculadora. Integraba toda una agenda electrónica y, por tanto, allí tenía todos mis compromisos, toda mi agenda de teléfono, notas, etc. Lo utilice hasta que se rompió una década después (y me parece que en todo ese tiempo nunca le cambié la pila), luego de lo cual nunca más volví a tener reloj porque disfrutaba de exactamente lo mismo, y más, en un celular, incluyendo la sincronización con otros dispositivos y la nube.
Para ir finalizando este rápido recorrido, no puedo dejar de mencionar que durante un par de años trate de estudiar ingeniería y me encontré con varios de mis compañeros utilizando calculadoras científicas HP 48GX y Hp 48g.
HP 48G |
Esas calculadoras eran ciencia ficción. Se las podía programar. De hecho, había que hacerlo y un grueso manual ayudaba en eso. Algunos compañeros se entretenían creando virus para arruinarles el día a otros compañeros que no tenían otra opción que ver la forma de neutralizar el virus para continuar estudiando. Horas y horas perdidas en eso.
Algunos programas eran verdaderos procesadores de textos donde algunos estudiantes almacenaban “ayudas” para los exámenes. Se las podía ampliar con tarjetas de memoria. Se podía jugar y disfrutar de algunos dibujos animados. Podían sincronizarse con un PC (el cable original era muy caro por lo que los fabricábamos artesanalmente). Incluso podían intercambiar información mediante puertos infrarrojos (era común que un compañero que saliera de un examen le diera una “ayuda” al compañero que aún no había ingresado al mismo).
Estas calculadoras eran tan atesoradas que era fácil reconocer a un estudiante de ingeniería porque la llevaban todo el tiempo en el cinturón (junto a la navaja suiza, una linterna de supervivencia y un escuche con bolígrafo, portaminas, goma/borrador y otros útiles).
Podría seguir pero creo que estos son los ejemplos que me resultan más curiosos.
Lo que también es retro es este articulo, ya que también es mi último artículo en Wintablet.info. Por motivos laborales y personales, incluyendo perdida de interés y cambio de gustos, he decidido apartarme de esta comunidad y tomar un nuevo rumbo.
Wintablet.info es un sitio y una comunidad cada vez más saludable. Cada vez tiene más seguidores y participantes y nuevos editores de extraordinaria calidad. Fue apasionante formar parte de su historia durante sus primeros años de vida (creo que esto desde las primeras semanas), pero es un buen momento para seguir otro camino y disfrutar de la sangre joven.
Durante esto años escribí algunos artículos mediocres y otros que me llenan de orgullo. Pueden releerlos todos aquí [y ahora también en tecnoedallavilla.blogspot.com]. Me pregunto cuáles son los que más le han gustado a usted.
¿Cómo continúa mi historia ahora? antes que nada, continuaré como un simple lector y comentarista. Me han dejado la puerta abierta para regresar como editor en el futuro, pero lo más probable es que me mantenga en el perfil pasivo que ya tenía en los últimos tiempos (además, dicen que así puedo participar del sorteo de una wintablet, recuerde sumarse a slack para participar usted también).
Además, cree un nuevo blog personal. Aquí iré literalmente copiando todos mis artículos en wintablet.info y otros medios de lo que he participado en mi vida. En todos los casos, haciendo referencia a la fuente original. Constituirá ante todo un backup personal. La mayoría de lo que se encontrarán allí ya lo han leído en wintablet.info. Otras cosas les podrían resultar menos familiares porque las he escrito en otros lugares a lo largo de la última década. Pero no se engañen, no tengo previsto en lo inmediato generar material nuevo vinculado.
¿Después de eso? quizás en un futuro indefinido retomo la escritura. Quizás más vinculado a cuestiones de mi disciplina (ciencia política, administración pública, economía política, relaciones internacionales, etc.). Quizás a otras ciencias o la tecnologías. En este momento no lo sé (Vagabundia lo expreso mejor).
Y eso es todo por el momento. No hay nada más retro que terminar con un buen tango del sur:
Ahora si….
The End.
©2016. Este artículo fue escrito por Quique el 18 de mayo del 2016 bajo licencia CC BY-NC-SA para WinTablet.info, sitio pionero en la divulgación y análisis de la industria de las tablets con Windows, sus aplicaciones, accesorios, periféricos, tendencias y temas relacionados.
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